En Casa Grande vas a vivir una historia dentro de tu historia. Aterrizar en el inmenso parque, descubrir con otros viajeros, compartir en nuestra cocina, el punto de reuniones y mate. Hacer amigos aquí es muy fácil: siempre te encontrarás con alguien yendo de las hamacas a la habitación, de la mesa de ping pong al quincho o de la barra a la pile… cada momento es un pedacito de historia que se entrelaza y se teje en la red de amistad, que puede durar lo que lleve tu estadía: una noche, un fin de semana o diez días, no importa cuánto sea: ese hilo va a seguir latente, las amistades que hiciste van a perdurar y seguro, seguro, vas a volver a revivir la magia del bosquecito, el encanto de la sierra y el sol puntano… esto es Casa Grande: un mundo en el lugar.